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Planta de áloe vera o sábila.
Áloe vera, sábila o acíbar está recogida dentro de las 300 especies de áloe reconocidas de nombre científico Áloe Barbadenses, de la familia de las liliáceas esta subespecie de áloe se distingue de otras porque contiene gran cantidad de gel.
Su hábitat natural se centra sobre todo en zonas con pocas precipitaciones, es decir semidesérticas o desiertas.
Especie vegetal de hojas alargadas y dentadas, muy carnosas, al tacto da la sensación de estar mulliditas, porque en su interior alberga un rico gel, muy valorado y apreciado en el mundo de la cosmética.
Su aplicación tópica viene desde la antigüedad como remedio popular muy empleado para calmar las lesiones ocasionadas por el sol, además para curar heridas.
Cultivo de la planta áloe vera o sábila.
Esta planta tiene sus propias características a la hora de cultivarla. No soporta nada bien el frio intenso por lo tanto no aguanta las heladas, tampoco le gusta el exceso de agua ya que se pudre, sin embargo tolera bien la sequía y el calor. Crece bien en zonas sombreadas, aunque le va mucho mejor la luz del sol.
En climas templados es mejor plantarla al aire libre. No es muy exigente con la composición de la tierra, aún así tiende a crecer muy bien en tierras francas.
En aquellos climas donde los inviernos son duros es mejor sembrarla en maceta, así se podrá trasladar y resguardar de las heladas. En el fondo de la maceta pondremos tierra para que drene bien.
De vez cuando echaremos algo de compost para enriquecer la tierra mejorando el estado de crecimiento de la sábila, otra característica destacable de esta planta es su resistencia a las plagas.
Composición del áloe vera o sábila.
La composición fitoquímica del áloe vera o sábila le concede un gran abanico de propiedades muy apreciadas. Varios compuestos se encuentran en sábila los más predominantes son:
Aloína.
Vitaminas:
- Vitamina B12.
- Ácido ascórbico.
- Vitamina A
- Ácido pantoténico.
Minerales:
- Magnesio.
- Azufre.
- Calcio.
- Potasio
- Zinc.
- Cobre.
- Hierro.
- Fósforo.
- Cromo.
Propiedades del áloe vera o sábila.
Los polisacáridos que conforman el gel de esta planta le confieren propiedades medicinales vegetales muy beneficiosas para la piel siendo muy eficaz:
- En la cicatrización de heridas.
- Para quemaduras solares.
- Otra clase de quemaduras como las producidas por salpicadura de aceite.
- Astringente.
- Antiséptico.
- Calma irritaciones.
- Antiinflamatorio.
- Calmante digestivo.
Esta planta se usa a nivel interno por medio de la ingesta o de uso tópico para tratar dolencia determinadas de la piel.
Otra planta cicatrizante es la centella asiática. En formulas magistrales se combina con equinácea e hipérico también es buena aliada para procesos inflamatorios y calmantes como la manzanilla.
Beneficios y cuidados de la piel con áloe vera o sábila.
Especie vegetal de uso tópico tradicional desde la antigüedad por sus buenas cualidades ha servido para alivio y mejora de afecciones leves de la piel, ya sea de aplicación directa pura o como ingrediente principal de productos cosméticos o en cataplasma.
Por su contenido en lignina y facilidad de penetrar en la piel se utiliza como compuesto regenerador y cicatrizante. Estas propiedades del áloe vera favorecen y acelera la cicatrización de tejidos.
Esta capacidad regeneradora le hace útil para tratar pequeños procesos irritativos de la piel después de alguna actividad erosiva, como es el afeitado o la depilación más extensa, ya que calma el escozor cutáneo incluso después de la exposición al sol.
El áloe vera tiene una leve propiedad calmante, de ahí se entiende su uso en herpes, además protege a la piel de pequeñas infecciones.
Otro de sus usos tradicionales destacable es en acné debido a sus propiedades astringentes y limpiadoras porque elimina bien la suciedad acumulada. Se recomienda su utilización en pieles grasas, con acné o mixtas.
También se utiliza para calmar los efectos adversos de la radioterapia en la piel.
En odontología se emplea en algún tratamiento bucodental con presencia de llagas y gingivitis.
Su propiedad regeneradora hace que esta planta se emplee para elaborar productos cosméticos para prevenir y mejorar estrías porque puede contribuir a reparar las fibras de colágeno.
Otra utilidad en cosmética es que forma parte de productos de higiene personal y para frenar la caída del cabello, elaborar mascarillas capilares, champús para cabellos secos y castigados y geles corporales.
También se utiliza en la elaboración de jabones, geles de baño, leches limpiadoras o agua miscelares.
Para la piel se confeccionan mascarillas hidratantes tanto para cutis secos, mixtos o grasos. En pieles grasas controla el exceso de sebo. También forma parte de cremas para la cara ya sean de día, de noche o de manos.
En realidad el áloe vera o sábila es un potente hidratante ya sea para la piel y el cabello.
La contraindicación o inconveniente que presenta es para aquellas personas alérgicas o que no toleran bien esta planta.
Otros usos del áloe vera o sábila.
No solo se utiliza el áloe vera o sábila para uso tópico también se puede ingerir. En el mercado se puede encontrar en diferentes formatos, para hacer infusiones, como complemento alimenticio o en forma de zumo.
Otros compuestos de áloe vera o sábila comercializados en herbolarios o farmacias sirven para mejorar el estreñimiento temporal. Este uso se debe a su contenido en un compuesto amargo y amarillo llamado aloína con capacidad de activar los movimientos del intestino grueso
Además también contiene otro compuesto que mejora las defensas denominado carricina.
Contraindicaciones del áloe vera o sábila.
Su aplicación tópica está bastante extendida y no presenta riesgos. Sin embargo las personas alérgicas o con cierta intolerancia a esta planta evitaran su aplicación.
La ingesta de áloe vera no está indicada en niños, tampoco en mujeres embarazadas, en personas diabéticas o aquellos que presenten patologías intestinales.
Conviene consultar con el farmacéutico o personal sanitario para su prescripción.